Santo Domingo.- Decenas de ciudadanos han reportado irregularidades en la emisión y gestión de multas de tránsito por parte de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (DIGESETT). Las quejas incluyen multas duplicadas, errores en la asignación de placas, y fallos en el sistema que dificultan el derecho a defensa de los conductores.
Según denuncias, al consultar sus récords de infracciones, algunos usuarios encuentran multas por infracciones que no reconocen, colocadas en lugares donde nunca han estado, o incluso vinculadas a vehículos que no les pertenecen.
Una joven relató que, al visitar la sede de DIGESETT para aclarar una infracción, le explicaron que, si el sistema se cae durante la digitación, los agentes pueden volver a introducir la multa por precaución, lo que duplica la sanción. Esta práctica, aunque interna, termina afectando directamente al ciudadano.
Otros denunciantes aseguran que, al intentar resolver el problema, enfrentan barreras legales. La ley establece un plazo de 30 días para pagar voluntariamente o impugnar la multa ante un tribunal. Si no se actúa dentro de ese periodo, el ciudadano debe esperar un año para que la infracción prescriba o iniciar un proceso legal más complejo.
“Yo nunca he manejado ese vehículo ni conozco a su dueño. Aun así, aparezco con varias multas asociadas a esa placa. Me dijeron que ya pasaron los 30 días, así que debo pagarlas o esperar un año”, declaró uno de los afectados.
También se denunció que muchas multas son impuestas sin pruebas visuales. Los ciudadanos proponen que los agentes deban subir imágenes del vehículo en infracción como evidencia obligatoria, lo que contribuiría a mayor transparencia y reducción de errores.
La falta de comunicación sobre nuevas medidas de tránsito, como la prohibición de parquearse en toda la avenida 27 de Febrero, ha causado el remolque sorpresivo de vehículos, generando malestar entre los conductores que alegan no haber sido informados previamente.
En otros casos, se reportó que las multas fueron asignadas sin requerir documentos de identidad, lo que permite que los errores se propaguen y abre la puerta a asignaciones arbitrarias.
Ante este panorama, ciudadanos exigen a DIGESETT:
Refuerzo de controles internos
Protocolos más estrictos de verificación
Garantías para ejercer el derecho a defensa
Canales ágiles de reclamo que no afecten el historial vehicular ni el derecho a circular libremente